Me encantó la relación calidad-precio de este hotel. Además, el personal fue amable y servicial, lo cual hizo que nuestra estancia fuese aún más agradable. Las habitaciones, recientemente renovadas, eran cómodas y bien equipadas. disfrutamos del desayuno, que era variado y delicioso. Algo que me impresionó fue la atención al detalle, como la ubicación conveniente cerca de un área de descarga para automóviles diésel protegida.

Todo estuvo bien.

Un desayuno maravilloso con un montón de comida. Personal super agradable, habitaciones de buen tamaño con baño y un dormitorio y también una hermosa terraza. Está en una ubicación excelente, hay unos cuantos restaurantes excepcionales. A 20 km del aeropuerto.

Me ha gustado mogollón el hotel, el interior era interesante. Las habitaciones eran ordenadas y modernas con tres camas, baño y un dormitorio. El servicio prestado fue excelente. Además, era fácil aparcar en la entrada. La propiedad tenía su propio restaurante gourmet, era increíble.

Es una propiedad perfecta con un desayuno increíble. Los que trabajan allí son increíblemente agradables y super agradables. Cama súper cómoda, habitación práctica, con un buen diseño y de buen tamaño con vista al patio interior.

No se me ocurre nada.

Habitaciones con tres camas. Tenían un diseño encantador, un refrigerador minibar, una zona de estar y una mesa de trabajo. Ubicación: el hotel estaba no muy lejos de varios lugares, como un restaurante y del centro. Además, estaba cerca de la estación de metro👌👍😃

El ambiente era tranquilo y me ha gustado cada segundo de mi estancia allí, fue decente. La comida estaba buenísima, el personal era muy acogedor y acogedor. Las habitaciones eran funcionales y súper limpias con camas super cómodas. Los servicios eran excelentes. El hotel tenía una ubicación céntrica, en una zona tranquila. Comimos en Burkle, que está a una distancia moderada del lugar...

Cada vez que vamos a Stuttgart nos alojamos en este hotel. La atmósfera del hotel es tranquila. Una habitación de buen tamaño y moderna con tres camas. Un desayuno gratis y maravilloso con yogur, queso y huevos duros y un servicio excelente.

El ambiente familiar y tradicional

La ubicación sin pago de estacionamiento. El personal amable.El parque Gottlieb-Daimler-Gedächtnisstätte

Honestamente, no había nada.

Nos encantó nuestra estancia en este acogedor hotel. El personal fue excepcional y nos hicieron sentir como en casa. La ubicación es ideal, cerca de una estación de metro y a pocos pasos de una parada de tranvía, lo que facilitó explorar la ciudad. La habitación era moderna y cómoda, y el desayuno, con una amplia variedad de opciones, fue delicioso. Definitivamente recomendamos este hotel para los amantes de la naturaleza.

La falta de aire acondicionado en las habitaciones fue un inconveniente en los días calurosos.

Fuimos un grupo de amigos y nos la pasamos increíble. Primero, visitamos el impresionante museo de Daimler, que está a solo unos pasos del hotel. ¡Qué locura ver todos esos autos antiguos! Después, nos divertimos como nunca en el estadio de fútbol, ¡animando a nuestro equipo favorito! Y para terminar con broche de oro, nos lanzamos a la feria Waasen y disfrutamos de los juegos y las atracciones más emocionantes. ¡Fue una experiencia de otro mundo!

Lo único que nos faltó fue un lugar para bailar y disfrutar de la fiesta. Nos encantó nuestra estancia en el hotel, pero nos hubiera gustado encontrar un lugar dentro para bailar y pasarla bien por las noches.

Tenía muchas ganas de visitar el clubCANN y elegí el Hotel Restaurant Krehl's Linde por su excelente ubicación en Bad Cannstatt, donde se encuentra el famoso Cannstatter Wasen. Sin embargo, me sorprendió gratamente la cálida bienvenida del personal amable. Además, el personal del hotel me brindó información sobre los puntos destacados de la ciudad, como el museo Staatsgalerie. me gustó mucho que hubiera servicio de limpieza en seco en el hotel.

Estacionar en la calle puede ser complicado y el wifi es deficiente. El punto más débil de mi experiencia fue que la puerta del baño, al menos en nuestra habitación, era de vidrio transparente.